Prostitución “inversa”
Si bien la concepción habitual y la práctica histórica de la prostitución implica la compra de servicios sexuales de una mujer por parte de un varón, también existe la prostitución en la que quien compra los servicios es una mujer y quien los vende, un varón. Berg y colaboradores revisan en The Journal of Sex Research la investigación (generalmente reciente) sobre la materia y encuentran que las mujeres “compradoras” suelen ser de edad madura e independientes económicamente y buscan satisfacción sexual, mientras que los varones “vendedores” son jóvenes y vulnerables desde el punto de vista socioeconómico y buscan gratificación económica.